Para derrocar a Maduro. WSJ vincula a Leopoldo López con la contratación de mercenarios

Durante meses, uno de los dirigentes políticos de la oposición venezolana, Leopoldo López, habría estado planificando la contratación de mercenarios que fueran capaces de capturar, detener o eliminar al actual presidente Nicolás Maduro, según lo informado por fuentes involucradas en la operación al Wall Street Journal.
De acuerdo al WSJ, Leopoldo López y el partido político Voluntad Popular (VP) tuvo a seis contratistas de seguridad privada como opciones a considerar para provocar una rebelión dentro de las Fuerzas Armadas de Venezuela y, en consecuencia, un golpe de estado.
Igualmente, López, actual mentor político del presidente interino, Juan Guaidó, habría sido la mente maestra detrás del caso de Juan José Rendón y Sergio Vergara, miembros del Comité Estratégico del gobierno interino quienes asumieron la responsabilidad de firmar un contrato con el exboina verde Jordan Goudreau para derrocar a Maduro.
A pesar de las acusaciones, Guaidó y su equipo habían declarado tiempo atrás que, antes de los dos intentos de incursión frustrados en las costas de Macuto (La Guaira) y Chuao (Aragua), llevaban seis meses de haber cortado relaciones con Goudreau.
¿Pérdidas en la credibilidad de Guaidó y Voluntad Popular?
“Maduro salió triunfante y sus adversarios políticos se han quedado fracturados, desmoralizados y sin una estrategia clara”, reseñó el medio estadounidense.
La razón detrás de este argumento es que las intenciones de Guaidó de mejorar el estado actual de Venezuela no quedan claras, por un lado tiene momentos en los que busca la negociación con el chavismo y en otros no.
“Da la impresión de que está tratando de montar dos caballos, uno en la vía de negociación y otro más en la vía del golpe de Estado”, una indecisión que políticamente le ha costado a Guaidó su credibilidad entre los venezolanos, actualmente su aceptación es del 25%.
Ahora los políticos opositores reconocen que fue un error que Voluntad Popular se involucrara con mercenarios para planear un intento de golpe de estado.
Sin embargo, algo que no tomó en cuenta el Wall Street Journal fue la súbita renuncia de tres integrantes de VP, quienes en cuestión de menos de una semana renunciaron a sus puestos dentro del partido.
La primera en retirarse de VP fue la dirigente política Ana Karina García por ya no poder tolerar decisiones y hechos irregulares ocurridos dentro del partido. “Son muchos los hechos que ocurrieron, la información a la que tuve acceso y cosas que vi que pasaron frente a mi, por las que me deslindo de Voluntad Popular”, explicó García en Twitter el pasado 8 de junio.
El segundo fue el caso del diputado a la Asamblea Nacional, Rosmit Mantilla, quien aseguró no compartir las decisiones, ni las visiones políticas de VP orientadas a erradicar la dictadura.
La renuncia más reciente —del pasado 14 de junio— fue la de la diputada a la Asamblea Nacional, Gaby Arellano. Según la parlamentaria, la forma y el fondo de cómo y dónde se dirige esta organización política, están en contra a su visión, valores y principios.
Estas fueron tres renuncias tan repentinas que los venezolanos comenzaron a cuestionar los movimientos internos que estaba llevando a cabo Voluntad Popular como para romper con los principios y valores de sus integrantes.
Lo que sí se conoce es que la fuente del WSJ dijo haber rastreado las planificaciones desde Bogotá del partido opositor y aseguró que “ellos fueron los que legitimaron a Goudreau y la idea de toda esta operación”.
“Esperemos que no hayan otras acciones deshonestas en el futuro”, declaró el informante al WSJ.
The Walt Street Journal