El pasado lunes, 04 de abril, sobre las 9:00 de la noche, María de los Ángeles Araujo, de 26 años, fue asesinada tras recibir varios disparos con arma de fuego cuando trabajaba en su puesto de empanadas en Valledupar, capital del César.

Según relató Adalberto Aníbal Coronel, expareja de la víctima, esta se encontraba en el punto de ventas, ubicado en el barrio San Martín, cuando cuatro sujetos en dos motos se le acercaron y, sin mediar diálogo, le dispararon por la espalda. Los criminales, que al parecer serían pagadiarios, prendieron sus motocicletas y emprendieron la huida sin que dieran tiempo de reaccionar.

Quienes presenciaron el acto auxiliaron a la mujer, la cual fue trasladada a la clínica Santa Isabel. Sin embargo, falleció minutos después de ingresar debido a la gravedad de las heridas.

La víctima, de nacionalidad venezolana, habría sido ultimada porque no pagó una deuda que tenía pendiente desde hace cuatro meses, de acuerdo a la información de medios locales. Incluso, Coronel manifestó que el 1 de abril ocurrió un hecho similar con los prestamistas ‘gota a gota’, los cuales se acercaron hasta su vivienda y la amedrentaron.

“Al parecer les debía 300.000 pesos, pero por un atraso en tres letras, le aumentaron los intereses. La primera vez se generó una riña y hasta llegaron a amenazarla con matar a un hermano, patearon las rejas de la casa y María De Los Ángeles salió a defenderse con un palo causando daños a una motocicleta de los cobradores, quienes de inmediato le advirtieron que eso no se quedaría así”, dijo.

En el medio ‘Diario del Cesar’ pudieron conocer que, cuando ocurrió este último incidente, varios allegados le recomendaron a Maria de los Ángeles que interpusiera la denuncia ante la Fiscalía. Ello porque en la tarjeta del control de pago aparecía un nombre que podría estar vinculado con los encargados de cobrar.