Eran contrabandistas. Asesinados venezolanos en zona fronteriza de Colombia

Juan Carlos Canchica Angarita, de 29 años, y Jack Manuel Cárdenas Carrillo, de 33, fueron asesinados la noche del jueves 31 de octubre en la finca Casa Blanca, de la vereda El Palmar de la Villa del Rosario en Colombia.
Los dos amigos estaban trabajando con mercancía de contrabando por ese sector fronterizo y se movilizaban en un Chevrolet Spark gris oscuro, de placa venezolana AB946NV.
“Eran las 7:30 de la noche y ellos ya estaban de regreso a dejar el carro guardado en esa finca”, dijo un testigo.
Cárdenas Carrillo, quien venía como acompañante en la silla delantera, se bajó a abrir un portón metálico para ingresar a la finca, cuando de repente unos hombres armados les salieron por los lados y empezaron a dispararles, sin mediar palabra alguna.
“Él (Cárdenas) alcanzó a correr unos 20 metros, pero las balas lo alcanzaron y cayó tendido a un lado de la vía. Mientras que Canchica Angarita intentó huir conduciendo su vehículo y, aunque alcanzó a conducir unos 200 metros, terminó estrellándose contra una pared. Luego hasta allá fue rematado por los asesinos”, añadió el testigo.
Ambos amigos residían en la parte alta de El Palotal. Juan Carlos Canchica era más conocido como Tailon y dejó un niño de 6 años y una bebé 18 meses. Por su parte Jack Manuel, era padre de tres hijos, todos también menores de edad.
El coronel José Luis Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, manifestó que los crímenes en las trochas obedecen a la pelea entre grupos armados por el dominio del territorio y de actividades ilícitas como el contrabando y el narcotráfico.
“La primera hipótesis que tenemos es que los ciudadanos estarían comerciando con combustible, carne, medicamentos y elementos varios para la salud y otros que llevarían de Colombia para Venezuela”, dijo el coronel.
La Opinión