Marianella Chirinos, como muchas venezolanas en el mundo, encontró una actividad para encontrar el apego necesario y encontrar nuevos objetivos para triunfar y encontrar su sitio en el mundo.

Marianella Chirinos, es graduada en Trabajo Social, oriunda de Falcón, formada en la Universidad Central de Venezuela, ha resaltado con su trabajo voluntario en el municipio Rivadia, provincia de Buenos Aires, Argentina.

Como muchos de su familia, ella tomó la decisión de emigrar de Venezuela, no es una decisión sencilla a su edad, pero se llenó de aplomo e inteligencia.

Ha impulsado 20 merenderos o comedores populares donde se atienden a niños de escasos recursos.

En una entrevista para la cuenta IG Diaspora Venezolana, contó la trabajadora social que hacen recolecta de fondos para adquirir lentes para niños con problemas de visión. Nela, conocida así por sus amistades y familia, es madre de tres varones, licenciada en Trabajo Social en la Universidad Central de Venezuela (UCV), magister en Gerencia Pública y docente jubilada de la Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (Unefm) de Falcón.

Allí reveló que su decisión de emigrar se debió a que se cansó de participar en protestas, al desgaste económico y psicológico que enfrentó por las arbitrariedades del gobierno de Nicolás Maduro, que devinieron en una situación de persecución para su hijo mayor, quien fue amenazado de muerte.

“Yo, al igual que otros venezolanos, decidí emprender el viaje hacia otros rumbos que me permitiera vivir en condiciones de vida favorables y donde mis dos hijos menores pudieran alimentarse bien, estudiar tranquilamente y desarrollarse”, expresó la falconiana.

Además agregó «Dejé mi linda casa comprada con tanto esfuerzo y me arriesgué, a mi edad, a salir a buscar una oportunidad»

Chirinos se fue a Argentina y desde que llegó he estado realizando Trabajo Social Comunitario, organizando muchas actividades, «impulse la creación de la unión vecinal, doy asesoramiento gratuito para elaborar proyectos de emprendimiento familiar, he organizado jornadas de salud, hacemos ollas populares para repartir comida, impulsé la creación de 20 merenderos y comedores en la provincia donde se atienden a muchos niños, recolección de fondos para comprar lentes a niños con problemas de visión, entre otras tantas actividades comunitarias» comentó.

La esforzada dama manifestó que «En la actualidad mi esfuerzo ha sido reconocido por las autoridades locales y me gané un Premio y lo quiero compartir todos porque yo llegue a la Argentina con una depresión muy grande, sentía el duelo de haber perdido muchas cosas y hacer trabajo comunitario me sacó de esa depresión»

Además agrega que al día de hoy día tiene ofertas para ser candidata a Concejal y está muy orgullosa de la educación y formación que recibió en Venezuela.