Desde Ciudad Ojeda. Emprenden con el sabor venezolano en Chile

“Deléitate y Saborea” es un emprendimiento de una pareja de venezolanos que dejaron su amada Ciudad Ojeda para irse a Chile con todos los sueños y ganas de triunfar.
María Gricelda de Pirela y su esposo Miguel emigraron a Chile desde Ciudad Ojeda, hace 3 años con sus hijas y un bebé.
María Gricelda tuvo 12 años con un negocio familia, una ferretería, y dice que les iba muy bien pero cuando les tocó venderlo lloró mucho.
“Tenemos 21 años juntos. Edificamos una bella familia. Tuvimos una ferretería en Venezuela y de pesar clavos y tornillos ahora pesamos ingredientes”, cuentan.
María y Miguel tenían sus trabajos, pero tras el estallido social ella quedó desempleada y un solo sueldo no era suficiente.
“En diciembre de 2019 me atreví a cocinar quesillos y ponche crema. Llegó el 2020 y continué, esta vez con tortas de auyama y de piña. Llegó la cuarentena y con ello las quesadillas hechas por mi esposo”, detalla para la cuenta de Instagram Crónicas de Chile.
Pero un día de octubre en 2020 compró una lechosa y tomó la decisión de preparar el popular dulce tal como lo aprendió en su tierra.
“Me quedó mal. Aquí no había ni reverbero. Tampoco eso de poner bandeja encima del techo con la lechosa rociada de bicarbonato. Así lo hacía mi abuela. Duré 9 horas con la olla en el fuego. ¿Lo mejor? No me di por vencida. Volví a comprar y logré que quedará como lo que es: una exquisitez culinaria venezolana”.
Aprendió sobre manipulación e higiene de alimentos, conservación, envase idóneo, envasado al vacío, información nutricional. Entonces crearon @deleitateysaborea.cl y los empezaron a conocer. Así estuvieron presentes en muchas mesas navideñas de venezolanos en 2020.
“Nuestro propósito es que vuelvan a degustar nuestros sabores a pesar de los kilómetros de distancia y nosotros cocinarlos con esa receta de las abuelas y madres que están ausentes y puedan sentirlas cerca”, comenta.
La idea se extendió a otras delicateses y hoy día emprende con el sabor venezolano ante un público exigente pero con mucho esmero han logrado aumentar sus clientes.
Crónicas de Chile