El 8 de junio de 1984 se funda en la zona norte de Cabimas, el  barrio El Golfito, ejemplo de lucha vecinal, donde hombres y mujeres sumaron voluntades  para hacer de este sector unos de los más representativos de la parroquia Ambrosio, pero 36 años después: hoy vive sumergido en graves problemas de servicios públicos.

 Fueron muchos los protagonistas en la consolidación de El Golfito, que con  ímpetu de lucha social  y deseos de consolidación de la comunidad lograron establecer este barrio en lo que era el  campo de golf Coquivacoa de la Lago Petroleum Corporation.

 Luego de la nacionalización del petróleo en 1974 el Golfito quedó como un terreno abandonado hasta que esa  lucha social que caracterizaba a sus habitantes, lograron en poco tiempo la consolidación y mejoras sucesivas del sector, como fue la construcción de viviendas, delimitación de sus calles y  avenidas,  el asfaltado de las vías, la construcción de la Escuela Bolivariana “La Escuela es el barrio”, el alumbrado público, servicio telefónico, la gasificación y hasta una línea de transporte.

Igualmente dentro de la comunidad se ubica un estadio de béisbol (El Nido de los Pájaros), un Complejo Deportivo inconcluso desde 2001, varias plazas, entre ellas la plaza Luis Hómez ubicada entre las calles José Leonardo Chirinos y Ana María Campos. Dispone de varios centros de salud de Barrio Adentro, la Casa de Los Abuelos que lamentablemente hoy está  totalmente abandonada, así como un comedor comunitario para el beneficio de 60 niños del sector.

Este aniversario es recordado por una minoría  de la comunidad, quienes le hacen un llamado a la primera autoridad municipal para que atienda el problema del agua potable y de las aguas servidas, la puesta en funcionamiento de la Estación de Bombeo que fue desmantela en su totalidad, el gas doméstico, la recuperación de sus calles que desde 1998 no ha visto una capa de asfalto. Así como también la culminación del Complejo Deportivo-Cultural  El Golfito que tiene más de 10 años paralizado y hoy totalmente en el suelo convertido en un basurero público.