Muchos incendios obedecen a cortos circuitos y falta de mantenimiento de las redes eléctricas, pero cuando los cortos son en espacios públicos, no solo pone en riesgo la instalación sino la vida de los ciudadanos.

En el municipio Lagunillas ya han ocurrido varios incendios en las subestaciones eléctricas, que han dejado sin servicio eléctrico a centenas de hogares.

La falta de mantenimiento sumado a la sobrecarga en las líneas, genera resistencias en los tendidos eléctricos, en consecuencia, cortos circuitos con chispas que caen en la maleza.

Muchas familias sufren de los apagones por problemas en una calle o circuito, y en gran manera se debe al mantenimiento de las líneas principales.

Más allá del daño en la instalación, corren riesgos los hogares cercanos. Pero además, cuando la línea genera «cortos» puede ocasionar incendios.

«Una chispa se crea cuándo el campo eléctrico aplicado supera la rigidez dieléctrica del medio en el que se produce…

Si la fuente de alimentación continúa suministrando energía, la chispa evolucionará a un caudal continuo llamado arco eléctrico»

Un ejemplo fue el video de un vecino en el sector El Rodeo, parroquia Libertad y en imágenes muestra como las chispas caen sobre la maleza.

Los tendidos eléctricos requieren de un mantenimiento urgente, tanto en áreas residenciales como en las subestaciones y estaciones.

Pero que pudiera suceder si lo mismo sucede en una zona con mayor cantidad de maleza, seca y que la comunidad no se entere de la situación: el riesgo es exponencial.

El pasado 21 de mayo, la subestación ubicada en el sector Constitución de la parroquia Libertad dejó sin electricidad a gran parte de Ciudad Ojeda y Tía Juana.

En ocasiones anteriores, las frecuentes sobrecargas han generado incendios en la subestación ubicada en Las Morochas.

Al igual que en la subestación ubicada en la calle Vargas, la cual ha tenido frecuentes incendios, sobre todo, por el incendio de la maleza.