El anís estrellado no es tan popular, si muy conocida, pero quienes la utilizan no se arrepiente, pues brinda mucho sabor y aroma a los platos.

El anís estrellado tiene su origen en China, y así como tiene propiedades culinarias por su particular sabor, también es usado como tratamiento para ciertas afecciones del cuerpo humano.

El anís estrellado es rico en carbohidratos, proteínas, fibras y grasas saludables y también posee buena cantidad de vitamina A, vitamina C, hierro, magnesio, cobre y calcio.

Los beneficios del anís estrellado.

El anís estrellado es efectivo para la digestión pues más allá de que es rico en fibras alimentarias, el aroma del anís estrellado estimula las enzimas digestivas y la producción de saliva, lo que ayuda en la digestión.

El anís estrellado tiene amplia aplicaciones para contrarrestar la gripe, resfriados así como congestión; tiene efectos antibacteriales en los órganos del sistema respiratorio. Limpia las vías respiratorias y puede ser usado en personas que consideran que han sido contagiados con una gripe.

El anís estrellado puede ayudar en afecciones de la piel ya que tiene propiedades capaces de reponer el tejido y su capacidad contra hongos es muy apreciada.

Otro aspecto del Anís estrellado es que tiene complejo B, contribuye en buena medida la calidad en el funcionamiento de las células cerebrales pues suprime el nivel de homocisteína, evitando a largo plazo la demencia senil.

Es un excelente aliado contra el mal aliento, así que masticar anís estrellado ayudará a «no tener esa experiencia» pues combate los gérmenes en la boca y garganta.

Otros estudios consideran que el anís estrellado ayuda a la producción de leche para las mujeres en durante la amamantición.