La autoestima es el auto concepto que tenemos sobre nosotros,  bien sea positivo o negativo. Este conocimiento sobre sí mismo,  involucra el reconocimiento y aceptación de nuestras habilidades,  destrezas, debilidades y actitudes que definen a cada persona y que los hacen únicos.

Nos aceptamos cuando conocemos quienes somos y resguardamos  la autenticidad, como parte de nuestra identidad personal, respetando nuestros valores, principios,  opiniones y límites personales, aportando seguridad y confianza en sí mismo.

La aceptación,  es la capacidad que tiene el ser humano de aceptarse tal como es, en lo físico, psicológico y social; aceptar cómo es su conducta consigo mismo y con los otros. Implica  admitir y reconocer todas las partes de sí mismo como un hecho, como forma de ser y sentir. 

Una persona que no logre afianzar una autoestima sana,  puede desarrollar problemas psicológicos incluso llegando a adoptar conductas perjudiciales,   pero una autoestima bien establecida nos permite optimizar nuestro bienestar personal.

Una persona que no se acepta tal cual es, tiene baja autoestima y cualquier crítica o comentario puede ser destructivo  pues no tiene confianza en sí mismo,  ni amor propio.  Hoy en día,  hay  personas que tratan de  encajar en una sociedad  donde se sienten vulnerables ante las imposiciones de distintos patrones,  convirtiéndose en marionetas que no tienen vida propia.

Cuidar la autoestima es fundamental para mantener una vida en equilibrio,  armonía y bienestar. Cada persona es un universo diferente no se parece a otro.

Primero busca sentirte bien contigo mismo en cuerpo,  alma y mente,  cuida tu esencia y no te juzgues,  es normal en ocasiones no estar a gusto con algunas características,  pero siempre existe la oportunidad de reinventarse y trabajar en una mejor versión,  pero desde tu perspectiva y no desde la de los otros.

No es saludable agradar o complacer a los demás solo por sentirse aceptado en un grupo,   ignorando tus principios y valores,  anulando por completo tu propio ser.

Mantener una autoestima sana, nos permite relacionarnos bien con los demás de forma efectiva y satisfactoria sin sentirnos vulnerables ante las críticas y expectativas  de los demás.

Abog. Nilmary Boscán Maldonado