El cadáver de Catalina Escobar García quedó tendido en la escena del hecho,  la mujer debía estar cumpliendo su prisión domiciliaria. 13 millones de pesos fueron hurtados al conductor del camión NPR.

Una venezolana resultó muerta junto a otro hombre que formaban parte de un cuarteto de atracadores que  pretendieron hurtar un camión de víveres, cuando fueron sorprendidos por un cuadrante policial muy cerca del lugar de los hechos.

El hecho ocurrió a las 5:00 de la tarde del jueves, en cercanías al anillo vial oriental vía Boconó, cuando Eduann Ramírez Villamizar, conductor de un camión NPR, quien transportaba víveres y abarrotes fue interceptado por dos motos.

“En cada moto iban dos parejas, los hombres conducían y las mujeres eran las parrilleras. Cuando hacen frenar al conductor una de ellas lo baja y le propina un cachazo en la cabeza. Cometen el hurto, pero un cuadrante policial estaba a pocos metros y reacciona ante los gritos de la gente”, contó una fuente judicial.

Según se conoció, cuando los uniformados de la Metropolitana de Cúcuta llegaron intentaron evitar el hurto, pero se generó una persecución y una de las dos mujeres, que tenía en sus manos el botín de $13 millones, logró escaparse. Mientras que su acompañante resultó herido.

 “Los policías reaccionaron. Se tiraron a reducirlos (dispararles a las extremidades), pero respondieron al fuego y ahí es cuando en medio de la balacera son impactados los dos hombres y la mujer”, contó la fuente.

La venezolana Catalina del Carmen Escobar García, quedó muerta en la vía. Mientras que Francisco Severo Chinchia Romero y Wilmar Jaimes Guerrero quedaron heridos y fueron trasladados a un centro médico. Sin embargo, Chinchia Romero falleció cuando recibía atención.

En el sitio fueron hallados dos revólveres calibre 38, un casco y una motocicleta roja venezolana, placa AM2W26A ensangrentada.

Tenían antecedentes

Según las autoridades, la venezolana Escobar García tenía antecedentes por porte ilegal de armas de fuego y gozaba de medida de detención domiciliaria vigente.

A Jaimes Guerrero, le figuran antecedentes por hurto calificado y porte ilegal de armas con condena desde el 2011 y también tenía casa por cárcel.

El coronel José Luis Palomino López, comandante de la Policía Metropolitana, aseguró que los policías reaccionaron en defensa de terceros y de su propia vida.

Esta estr uctura criminal venía hurtando a pensionados, a mujeres que transportaban dinero de su sitio de trabajo a un banco”, dijo el coronel.

Y añadió: “También hemos logrado establecer que entre ellos mismos se robaban los botines”.

Las autoridades avanzan en los estudios a las armas halladas para establecer si participaron en otros hechos violentos..

La Opinión