Habitantes de El Consejo de Ciruma están sumidos en el terror por un presunto foco de Covid-19 que ha dejado más de 10 víctimas las últimas semanas.

Los casos de covid-19 siguen en una preocupante curva ascendente en la Costa Oriental del Lago, pero sus zonas rurales viven una pesadilla al carecer de los recursos necesarios para combatir el letal virus, uno de estos poblados, El Consejo de Ciruma atraviesa un peligroso foco de contagios.

Según cifras ofrecidas por dirigentes del poblado, más de 10 personas han fallecido por posible Covid-19 durante las últimas semanas. El pequeño poblado está ubicado en la parroquia San Antonio del municipio Miranda, estado Zulia. 

Sin acceso a medicinas por carecer de los recursos suficientes, sin suministro de oxígeno y sin equipos necesarios la cifra de fallecidos puede aumentar.

Muchas de las personas no son tratadas adecuadamente, y prácticamente cuando son llevados a un centro asistencial en Cabimas o Maracaibo, ya cuando el virus tiene un gran avance para evitar complicaciones fatales derivadas del coronavirus.

En muchos de los casos las personas se aíslan en sus hogares imaginando que son víctimas de una gripe fuerte o una neumonía simple.

Según informó Naidelin Chirinos, trabajadora del centro asistencial y dirigente social, el rango de fallecidos puede ser mayor si se incluyen los sectores aledaños. Son las cifras que no aparecen en ninguna estadística municipal o regional.

El centro asistencial de El Consejo de Ciruma atiende sin insumos, sin el suficiente personal, y tampoco con las herramientas necesarias para que el equipo médico pueda enfrentar los contagios al no contar con las mínimas condiciones de bioseguridad.

«El personal no cuenta con guantes para casos de coronavirus, ni trajes ni la cantidad adecuada de tapabocas para tratar a posibles pacientes de Covid-19; para variar, la sala de rayos X que permite hacer el teletoráx necesario no está habilitado» apuntó Chirinos.

Adultos, jóvenes y ancianos han sido víctimas mortales del coronavirus, y hasta el momento las autoridades municipales o regionales no se han presentado para hacer un balance y control de la situación.

Otro problema serio es el tema de las vacunas, muchos adultos mayores mayores no cuentan con los recursos para movilizarse hasta Cabimas o Los Puertos de Altagracia, por lo que tampoco pueden recibir el beneficio del retrovirus.

«Acá la mayoría trabaja en fincas o pequeños negocios, es imposible que puedan cubrir los gastos de medicinas. Hasta momento ni siquiera la Secretaría de Salud se ha presentado para suministrar medicamentos», agregó Chirinos.

Se calcula que en Venezuela, una persona con una afección moderada de Covid-19 requiere como mínimo unos 50 dólares para cumplir el tratamiento de un mes. 

Pero mientras pasan los días, en un poblado tan pequeño, sus habitantes son un blanco fácil para contagiarse de Covid-19.

Muchos pacientes llegan en terrible estado de salud, sus niveles de infección son muy altos, pero sin una ambulancia es imposible el traslado hasta la ciudad más cercana. El ambulatorio solo cuenta con la buena voluntad del personal médico y enfermeras que se arriesgan para cumplir su compromiso social.