Nuevamente  familiares de los difuntos que descansan en el Cementerio Municipal “Santísima Trinidad” ubicado en la carretera H del municipio Cabimas denuncian la profanación de tumbas y venta ilegal de parcelas de los panteones familiares.

Nelson Guerrero Habitante de las Nueva Cabimas destacó, que quiso hacer uso de una parcela propiedad de la familia y le fue imposible ya que se encontró que dentro del espacio había otra persona que no pertenece a su núcleo familiar.

Esta situación la logró detectar luego de solicitar un espacio diferente al de la familia y le pedían la suma de 12 millones por el pedazo de tierra, cantidad que no tenía en ese momento, por lo cual decidió hacer uso del panteón familiar, pero al llegar al lugar, el mismo estaba violentado.

Destacó,  que el camposanto de Cabimas se mantiene solo, sin vigilancia policial, full de basura, enmontado y sin el control por parte de la Dirección Municipal que allí tiene una oficina administrativa.

A la denuncia de Guerrero se le suma la de María Figueroa,  otra asidua visitante de este sitio, que  según ella,  “debería ser el lugar  del descanso eterno para los fieles difuntos, pero no es así”. Este espacio se ha convertido en guarida de delincuentes y de sitio para ejecutar  la santería, por lo que es necesario que las autoridades municipales tomen medidas rápidas ante esta situación que no es nada nueva, destacó.

Señaló que también se ha visto afectada con la venta de terreno con precios exorbitantes, cuando esto es del municipio, todo es un negocio lucrativo para un grupo que está dentro del camposanto.

Otros familiares manifestaron, que hay panteones que no son visitados por los familiares, han sido saqueados. Se llevan la cruz de metal, el porcelanato, las rejas de hierro y todo aquello que pueda tener un valor para ser vendido como chatarra. «Cuando la familia tiene necesidad de un espacio, es cuando se dan cuenta de las irregularidades que en «este santo lugar»se están cometiendo.